Monday, March 02, 2009

Vizi privati, pubbliche virtú / Vicios privados, públicas virtudes (1975)



Director : Miklos Jancsó

Guión/Screenplay- Giovanna Gagliardo
Music- Francesco DeMasi

Lajos Balazsovits... Archiduque Rodolfo

Teresa Ann Savoy... Maria Vetsera

Pamela Villoresi...Sofia

Franco Branciaroli...Duque



"(...)...Vizi privati, pubbliche virtú is a reinterpretation of the real-life "Mayerling affair," in which Crown Prince Rudolph and his mistress, the Baroness Maria Vetsera (Teresa Ann Savoy, here depicted as an hermaphrodite), committed suicide because they were not allowed to marry. Jancsó, and his screenwriter Giovanna Gagliardo, suggest that this is just the "official version." According to their story, the lovers were assassinated by men working for Rudolph's father, the Emperor Franz Josef. The film also reveals the motive for these murders: Rudolph and his friends were planning to overthrow the Emperor's rule.(...)

One of their plots to convince the Emperor his time was past—and that it was now the moment to allow the young to rise to power—consisted of attracting the children of the best families in the Austro-Hungarian Empire to their castle, and involving them in giant orgies. Pictures taken during these orgies were sent to the Emperor, in order to blackmail him and convince him to let the new order rule. Ironically, the same process of photography is used in the end by the imperial forces, to "make up" reality and imply suicide. After the couple are shot by soldiers, their corpses are made up to suggest a romantic suicide pact—the final comment on a society obsessed with image...(...)" (Rolland Man)

Estamos ante uno de los mejores films de Teresa Ann Savoy (curiosamente, aquí aparece por vez primera en el reparto como "Therese-Ann") y también uno de los más conocidos. Miklos Jancsó, maestro húngaro del plano secuencia y autor de filmes maravillosos como "Los desesperados" o "Salmo rojo", ajusta cuentas con el Imperio-Austrohúngaro reescribiendo la historia de los amantes de Mayerling, en la que el archiduque Rodolfo, hijo del Emperador Francisco José, y su amante, María Vetsera, se quitaron la vida. Aunque esto sucedió en 1889, la ausencia de herederos de Francisco José acabaría provocando, con el asesinato de su sobrino en 1914, la Primera Guerra Mundial. Jancsó concibe a un Rodolfo republicano, empeñado en derrocar a su padre, que concibe un estrafalario plan: organizar una fiesta en la que, tras haber drogado a los invitados, todos ellos aristócratas de alto rango, instarlos a participar en una orgía y fotografiarlos, para hacerles chantaje después. El sueño de Rodolfo es vivir feliz junto a su amante la baronesa María (Teresa), una hermafrodita que vive en un circo. Sin embargo, el emperador aborta el plan, haciendo matar a ambos amantes y a sus cómplices, y haciendo que todo parezca un suicidio.

El film está lleno de bellísimos planos secuencia, de una sensualidad exquisita (la escena de amor entre Rodolfo y María al final del film, ambientada con una música que es una copia del "Preludio a la siesta de un fauno" de Debussy) y en él abunda la particular simbología del universo de Jancsó (con bandas militares, cirios chisporroteando, pavos reales y elementos del folklore majiar). La película fue presentada en Cannes, aunque no ganó nada. Eso sí, el escándalo fue tan grande que fue secuestrada por orden de la justicia italiana, acusada de obscena. Teresa habla poco en la película (al menos algo más que en "Le faró da padre", donde sólo dice "fóllame" en italiano, aunque sin saber lo que significa) y, de hecho, tarda en salir, pero cuando lo hace roba todos los planos. Jancsó se encaprichó en que hiciera de hermafrodita y para ello mandó que luciera un pene postizo. La pobre Teresa aún recuerda lo doloroso que era que se lo despegasen tras terminar las tomas, hasta el punto de que siempre acababa llorando. En su opinión, el hecho de mostrar el hermafrodita con pene era demasiado explícito y hubiese preferido que la cosa fuese más bien insinuada. Eso sí, la escena en la que sodomiza a un general austrohúngaro (todo hay que decirlo, contra la voluntad de éste), resulta antológica. En la película la escuchamos cantar por vez primera y última. Jancsó le dijo que cantase alguna canción de su niñez y ella escogió "Baa, baa, black sheep" (sobre la que Mozart había escrito las variaciones 'Ah vous dirai-je maman":

Baa, baa, black sheep,
Have you any wool?
Yes sir, yes sir,
Three bags full;

One for my master,
One for my dame,
And one for the little boy
That lives in our lane.

Teresa recuerda con mucho cariño este rodaje y lamenta que no se hiciera un making-off de él. De hecho, dice que en los descansos y entre tomas se pasaban el tiempo tejiendo con lana.

Inspirándome en los personajes de Maria Vetsera (y en Teresa) y del archiduque Rodolfo, escribí el relato "Las horas tardías de Mayerling", incluído en mi libro de relatos "La orgía eterna" (2001, Ed. Ekoty). En él, el personaje de Maria está motivado por la necesidad de hallarse en una situación de peligro mortal para llegar al éxtasis sexual. Ese es más bien el desencadenante del suicidio y no una conspiración.


T.A.S. Films (1) Le farò da padre


Terry's first film/La primera película de Terry (1974)

Director/Directed by Alberto Lattuada;
Guión/Screenplay: Ottavio Jemma, Alberto Lattuada, Bruno Di Geronimo.
Music: Fred Bongusto;
Productor/Producted by: Silvio Clementelli

Saverio Mazzacolli . . . . . Luigi Proiettei
Donna Raimonda . . . . . Irene Papas
Clotilde . . . . . Teresa Ann Savoy
Peppe . . . . . Bruno Cirino
Don Amilcare . . . . . Mario Scaccia
Concetta . . . . . Lina Polito

Synopsis:

When the ambitious skirt chaser Saverio (Luigi Proietti) meets serenely nymphomaniac retarded rich Clothilde (Teresa Ann Savoy), he finds he has met his match; he calms down and she wises up. After he has bedded the girls' mother and a housemaid, he tries to figure out how to make use of his connection with this wealthy family to get a large loan -- which he needs for a business deal. However, the lustful designs of the otherwise witless girl overwhelm his own scheming, and he runs off with her. It is not clear whether he has been manipulated into this by the girl's conniving mother Donna Raimonda (Irene Papas), or if he is simply succumbing to his own desires. ~ Clarke Fountain, All Movie Guide

Sinópsis:

Un hombre de negocios sin escrúpulos, Saverio (Luigi Proietti) urde un retorcido plan para hacerse con la fortuna de una Condesa viuda (Irene Papas). Inicialmente, éste acepta casarse con la hija adolescente de ésta, una muchacha con retraso mental llamada Clotilde (Teresa Ann). Luego, decide secuestrarla a fin de argumentar que la muchacha ha sido 'tocada' y romper el compromiso. Lo que menos espera es enamorarse de la criatura en cuestión, un ser angelical para el cual no existe el pudor ni la inhibición... Se trata de la primera película de Teresa, que contaba 18 años de edad cuando la rodó. Alberto Lattuada se fijó en ella tras su aparición en las páginas de Playmen de octubre de 1973, en las que aparecía desnuda, fotografiada por su amante Carlo Silvestro (quien la había convencido de escapar del hogar paterno en Londres, siendo menor). Teresa no hablaba entonces una sola palabra de inglés y había hecho varios casting fallidos, incluyendo el film "Confesiones" de Visconti. Lattuada, otrora maestro neorrealista, se había apuntado a la moda del destape sin ningún recato, y decidió explotar a fondo los encantos de Terry, a la que definió como un "animal cinematográfico".
¿Qué se puede decir hoy en día de "Le faró da padre" (titulada en España "Padre putativo")? Sencillamente, que causa sonrojo verla, tanto por su escabroso argumento, como por lo inverosímil de la trama, de una incorrección política y un machismo alarmantes para los tiempos actuales. Eso sí, las escenas de amor entre Luigi Proietti y Teresa son entrañables y están magníficamente rodadas (a lo cual ayuda la hermosa música de Fred Bongusto), y de hecho, son las que demuestran el buen pulso de Lattuada como narrador.
En 2007, Teresa recordaba con cierto bochorno varias escenas escatológicas encomendadas a su personaje (que no olvidemos, tenía la mentalidad de un bebé en el cuerpo de una adolescente, y no era capaz de controlar sus necesidades fisiológicas) y afirmó que, si fuera por ella, las hubiera cortado.
Durante el rodaje, Lattuada puso música de Pink Floyd en la creencia de que eso haría a Terry actuar mejor. En realidad, era una invención de Carlo Silvestro, al que le gustaba proporcionar detalles falsos sobre ella, a fin de crearle una aureola de misterio.
La película funcionó muy bien en Italia, en Francia, e incluso en España (el estreno aquí fue en 1978, ya que hubiera sido impensable proyectarla en 1974, todavía en pleno franquismo), donde fue vista por 400.000 espectadores. En el mundo anglosajón fue distribuida como "La bambina".
En 2000, el pintor Duncan Hannah pintaría un cuadro titulado "Regarding Teresa Ann" sobre una imagen de Teresa tomada de esta película.

Movie review in New York Times, April 26, 1976:

Published: April 26, 1976

The Italian director Alberto Lattuada has made some splendid movies in his time: "Mafioso," for example, and the odd and interesting "Letters From a Novice." It doesn't seem to be his time any more, judging from "Bambina," which opened yesterday at the Paris Theater. There is a flicker of style in it, but it seems like a dying reflex.

The film is about a scheming young real estate promoter who loses his schemes and most of his wits in a passionate love affair with a mentally retarded 16-year-old girl. A feeble attempt is made to justify it as a kind of innocent Adam and Eveidyll. What is being justified is a lot of fairly explicit sex, aimed — such are the wonders of pornographic specialization — at people with a fetish for imbeciles.

Teresa Ann Savoy never really reaches imbecile level. Luigi Proietti looks as if he could be funny if he were ever to be cast in a funny movie. Irene Papas, as the girl's mother, presides in mournful amazement.